EXPLICACIÓN DEL CONCEPTO

En el fútbol base, ambos equipos generalmente quieren tener el balón, pero su nivel técnico y táctico no les permite lograrlo. Presionan para recuperar el balón, pero al tenerlo, pasan o driblan bajo presión, perdiendo la posesión instantes después.

Como equipo, lo ideal sería mantener la pelota y progresar de manera controlada. Algo difícil si no eres capaz de realizar lo anteriormente explicado de forma correcta. Por lo tanto, es muy importante trabajar una mentalidad presionante, y la capacidad de pasar o regatear bajo presión.

Los ejercicios que involucran espacios reducidos permiten una presión compacta inmediata. Este es el componente fundamental para forzar situaciones que queremos que se den. Los jugadores no solo tendrán que aprender a presionar tras pérdida, sino también buscar el regate bajo una presión rival de varios jugadores.

Una vez estos aspectos alcanzan un nivel lo suficientemente alto, el equipo puede comenzar a ejercer dominio sobre su rival. No importa qué tan bueno sea tu equipo, deben ser capaces de atacar y defender en fases no organizadas, debido a la facilidad con la que hay pérdidas en el fútbol base actual.

Los compañeros de equipo libres a menudo se encuentran en zonas más profundas y amplias. Por lo tanto, recuperar el balón para volver hacia atrás, puede permitir al rival a que se organice.

Al entrenar, los detalles importantes para inculcar a los jugadores son su posicionamiento, su toma de decisiones y el estilo de ejecución. Los jugadores deben aprender a tomar decisiones en un ambiente desorganizado. El entrenador debe ayudar en este proceso, aportando diferentes decisiones para que el jugador lleve a cabo en este tipo de situaciones. Deben decidir ellos cuál escoger.

Cuando se mira específicamente la presión tras pérdida, es útil presionar inmediatamente, ya que el oponente que ganó el balón normalmente tiene una posición en el campo diferente a la suya, y una visión un tanto limitada. Necesita recuperar la conciencia y equilibrio, por lo que es un momento ideal para recuperar nuevamente la posesión o forzar al error al rival. Los jugadores deben anticipar situaciones en las que el balón se puede perder, moviéndose hacia allí con velocidad, y si se pierde, moverse aún más rápido para aumentar la presión quitando tiempo y espacio al oponente. Todo el equipo debe moverse junto.

¿CÓMO ENTRENAR LA PRESIÓN TRAS PÉRDIDA EN ESPACIO REDUCIDO?

Puedes colocar a tu equipo con tu propio sistema en la tarea, si quieres trabajar el concepto y además tu sistema de juego, o simplemente colocarlos en una formación compacta, para trabajar los principios de la presión tras pérdida. Por ejemplo, los siguientes esquemas son los más compactos posibles, dependiendo del número de jugadores por equipo que añadas a la tarea:

• 4 jugadores: 1-2-1 (diamante)
• 5 jugadores: 1-3-1 o 2-1-2
• 6 jugadores: 2-2-2
• 7 jugadores: 2-3-2 o 3-1-3
• 8 jugadores: 3-2-3
• 9 jugadores: 3-3-3

Debe haber un mínimo de tres líneas con no más de tres jugadores por cada una, para que haya simetrías entre un jugador de la primera línea y la última. El ejercicio se puede ajustar al número de jugadores que necesites aumentando el tamaño del campo.

Todo el enfoque del ejercicio es el balón. Los entrenadores deben concentrarse en ser enérgico, animar a los defensores a ser rápidos y agresivos. Inevitablemente verás muchos errores, pero continúa apoyando a los jugadores, para que puedan seguir mejorando y entendiendo los errores de una manera diferente. Si tú como entrenador te mantienes activo y enérgico, indudablemente contagiarás a tus propios jugadores a seguir realizando esta presión, llegando a un punto en el que será una motivación enorme robar un balón o forzar el error rival.

MANTENER LA MOTIVACIÓN MEDIANTE REGLAS DE PUNTUACIÓN:

• 3 puntos por gol anotado tras robo con presión tras pérdida (equipo atacante).
• 2 puntos por romper la presión y avanzar (equipo defensor) / forzar al oponente a volver hacia atrás (equipo atacante).

¿Cómo debería ser el campo? Además de lo que hemos explicado sobre el número de jugadores y el aumento o disminución del espacio de entrenamiento según los jugadores que haya por equipo, es importante que el espacio sea más largo que ancho. Esto nos permitirá una facilidad más grande para ir a la presión tras pérdida al ser más estrecho, y una facilidad aún más grande para buscar la verticalidad.

Es importante además el tiempo de duración del ejercicio. Cuanto más pequeño es el espacio y más acumulación de jugadores, menos tiempo deberá durar. Más aún si los jugadores están realizando un esfuerzo constante para ir a la presión o evitarla. Intenta dar un descanso de al menos 3 minutos por tarea. Aprovecha para que los jugadores cambien de campo, se refresquen, o realiza correcciones.

El ejercicio incluirá momentos de todo tipo: tiros a puerta, acciones a balón parado, etc. No los evites. Se pueden dar situaciones muy buenas de presión tras pérdida o contraataques tras un saque de esquina o una falta. Esto hará que nuestro trabajo sea más completo y les ayude en los partidos.

¿QUÉ CORREGIR DURANTE LA TAREA?

Bajo mi punto de vista es mejor dar instrucciones a los jugadores a través de su propia perspectiva (percepción, proceso de pensamiento) corrigiendo cosas como:

• Orientación corporal
• Anticipaciones
• Mejora del campo visual
• Acción posterior a la pérdida o a la recuperación
• Dirección y velocidad de las acciones

Recuerda que como entrenador, debes mejorar la percepción individual del jugadores y su toma de decisiones.

CONCLUSIÓN

En el fútbol moderno parece haber un mayor enfoque en las fases organizadas. La desorganización es más fácil de crear y más difícil de prevenir. Los equipos de Guardiola suelen ser dominantes porque tienen la mejor fase ofensiva organizada y obligan al oponente casi constantemente a defender de manera organizada.

Uno debería considerar entrenar a su equipo en los principios de la desorganización, que son los momentos que más aparecen en el fútbol, tanto base, como profesional.

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