Los jugadores se involucran en defender situaciones de 1 contra 1 casi tanto como cualquier otra situación del juego. Por lo tanto, para ayudar a los jugadores a defender ese 1 contra 1 lo mejor que puedan, ofrecemos ocho consejos para tener éxito.
PERFILARSE PARA ORIENTAR AL LADO DÉBIL
El perfil de aproximación es una de las claves del éxito a la hora de defenderse de otro jugador. Los jugadores deben inclinar su cuerpo para no mirar directamente al jugador, sino que los fuercen a un lado específico. Generalmente, los jugadores deben inclinar su cuerpo para forzar al jugador contrario a alejarse de la portería, hacia la línea lateral. Si sabe de qué lado está el pie débil del atacante (leer con qué pie tiende a regatear o pasarla), también pueden perfilar la posición de su cuerpo para obligar a su rival a apoyarse en su pie débil.
ESTAR A UN BRAZO DE DISTANCIA
Al defender en situaciones de 1 contra 1, deben estar lo suficientemente cerca para obligar al defensor a bajar la cabeza. Cuando el jugador de tu equipo se acerca demasiado rápido, el rival puede pasarla fácilmente. Cuando está demasiado lejos del atacante, puede ver todas sus opciones. Al estar a un brazo de distancia, obliga al atacante a tener menos opciones y, al mismo tiempo, lo hace menos consciente de las opciones que tiene.
SIGUE EL MOVIMIENTO DE SU PECHO Y DEL BALÓN
Los atacantes pueden intentar evadir situaciones de 1 contra 1 con los pies, utilizando por ejemplo cambios rápidos de dirección. Pero la gran mayoría de los movimientos de los jugadores habilidosos en el 1×1 requieren que el jugador mueva las caderas y el pecho en la dirección en la que quiere ir, antes de tener que hacerlo con los pies. Al estar pendientes del pecho y del movimiento de las caderas, el defensor puede reaccionar más rápido de lo que le gustaría y evaluar más cuidadosamente en qué dirección se va a dirigir el jugador atacante.
PACIENCIA, NO SALTES DEMASIADO RÁPIDO
Cuando se defiende contra otro jugador, casi siempre es importante ser paciente y no lanzarse (a menos que esté cerca de la portería y a punto de disparar). Pero incluso entonces, al saltar rápido, el atacante es capaz de reaccionar rápidamente con un gesto técnico o incluso con un toque básico. ¿Por qué? Porque tienen la pelota. Ellos tienen el control de la situación. Y al tomar la decisión de encimarlo demasiado pronto en un intento de robarle la pelota, les facilita la decisión sobre qué hacer. Los atacantes inteligentes pueden incluso esperar a que el defensor tome la iniciativa antes de hacer su movimiento. Por eso es importante tener paciencia, esperar un toque, esperar a que pierdan el equilibrio, a que el balón esté más cerca del defensor que del atacante, etc.
USA LA LÍNEA LATERAL COMO SI FUERA OTRO DEFENSOR
Siempre que sea posible, el defensor debe forzar al jugador atacante a alejarse de la portería, hacia la línea lateral. La línea lateral puede actuar como un segundo defensor. Cualquier mal gesto técnico del rival, hará que el balón sea nuevamente de tu equipo, sin que ni siquiera tengan que hacer una entrada para recuperar el balón. Deben inclinar con cuidado su cuerpo para forzarlos a salir de los límites, sin dejarles espacio para recortar hacia el interior durante el proceso.
CONTROLA LA VELOCIDAD, LLEGA PRONTO
Para defender situaciones de 1 contra 1, es importante acercarse al atacante a la velocidad adecuada. Si te acercas demasiado rápido, es posible que puedan llevarse la pelota fácilmente, o al menos más rápido de lo que pueda soportar el cuerpo del defensor. Por eso es importante llegar al atacante temprano, como, por ejemplo, cuando se vea claramente que ese balón alto o largo, va a llegar a cierto jugador atacante. A medida que la pelota viaja hacia el rival, hay que ir acercándose para obligarlos a alejarse de la portería.
CRUZARSE CON EL DEFENSOR
Cuando no pueden enfrentarse al jugador (como cuando corren hombro con hombro) es importante ser fuerte y físico (lo justo) y cruzarse para ganar el balón con un toque fuerte. Deje que el atacante cometa el primer error y luego recupera el balón. No dejes que se vuelvan o retrocedan poniéndose hombro con hombro usando su fuerza para llevarse el balón. Si llegan hasta el final de la línea lateral, los defensores deben asegurarse del momento en que evitar el centro, pero no tirarse al suelo.
MENTALIDAD DE RECUPERAR EL BALÓN
Al combinar los puntos anteriores, tus defensores deberían estar en el camino de ganar casi todos sus duelos 1×1. Así que deben tener confianza en sí mismos y una mentalidad de que ganarán el balón cada vez que haya un duelo. Si tienen esa mentalidad, es posible. E incluso si no ganan el balón, pero fuerzan un error, como que el atacante se salga del campo o haga un mal pase, eso sigue contando como un gran trabajo defensivo. Incluso si el jugador puede hacer un pase bueno, pero se ve obligado a retroceder debido a su postura defensiva, eso también es una victoria.
Conclusión
Defender situaciones de 1 contra 1 es algo que todos los jugadores deben aprender a hacer, no solo los defensores. Con estos ocho consejos, casi todos interrelacionados y conectados entre sí, puedes confiar en la capacidad de tus jugadores para salir con éxito de estas situaciones.