Sucede una y otra vez que los equipos aparcan el autobús en su propio campo o área. Lo hacen porque no son favoritos o porque es parte de su estilo de juego. El Atlético de Madrid es un buen ejemplo. El equipo que rodea al entrenador Diego Simeone siempre se destaca por su defensa compacta y profunda. Superar a esos oponentes parece casi imposible. En lugar de molestarnos, debemos entender que esto forma parte del juego, y que cualquier estilo de juego, nos guste más o menos, es del todo lícito. Centrémonos en hacer que nuestros jugadores puedan resolver estas situaciones. Es por eso, que hoy os traigo un ejercicio para superar líneas defensivas profundas:
Ejercicio 1 para superar líneas defensivas profundas: 4 contra 4 con pase filtrado
Procedimiento: Se juega un 4 contra 4 más un jugador comodín. Después de tres pases, el jugador en posesión puede realizar el último pase al área de penalti para finalizar la situación de ataque. Tan pronto como se finalice la acción, el jugador comodín volverá a iniciar la jugada en el menor tiempo posible. Realiza series de no más de 7 minutos, y después intercambia a los equipos. Puedes variar el ejercicio añadiendo más jugadores una vez los conceptos trabajados salgan de manera natural.
Entrenamiento: Además de la calidad del pase, que puede ser por alto o raso, la atención se centra en que el atacante esté pendiente de las situaciones que provoca el juego para saber cuándo desmarcarse o cuando bajar a recibir para que sea otro el que ataque el espacio generado por él. Si los jugadores reaccionan rápidamente tomando decisiones inmediatas, el resultado será el de un ejercicio de entrenamiento dinámico con muchos movimientos de los diferentes jugadores, muchas finalizaciones y muchas situaciones que servirán para el partido del fin de semana.
Consignas para superar líneas defensivas profundas: para conseguir un ejercicio correcto enfocado al concepto que estamos trabajando, es importante hacer que tus jugadores varíen la posición, pero ocupando siempre los tres carriles; además de ofrecer posibilidades de pase interior, y en amplitud. Para fomentarlo, cada vez que haya un gol después de haber habido intercambio entre jugadores de distinto carril o de distinta línea, el gol valdrá doble. Habla con tus jugadores los distintos tipos de desmarque que pueden realizar en este tipo de situaciones: en diagonal entre lateral y central, entre centrales, etc. La manera de perfilarse según la posición del poseedor es igualmente clave: los atacantes deben mediante su posicionamiento corporal, indicar al jugador con balón dónde enviar el pase y cómo hacerlo. Revisa nuestro artículo sobre la comunicación a través del pase para entenderlo mejor.
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