La formación 5-3-2 es bastante defensiva y puede ser una propuesta difícil de enfrentar para cualquier rival. Esto se debe a que es muy difícil romper con una línea de cinco defensores asentados frente al área y tres centrocampistas acosando a los rivales una línea por delante.

Si bien los equipos lo usan con frecuencia con la esperanza de esperar al rival y obtener una victoria contra un oponente superior, la formación puede ser también de ataque, como demuestran equipos como el Sheffield actual, o el Sevilla de Pablo Machín. Aunque esto depende del tipo de jugadores que tengas disponible y las instrucciones que les des.

Como ejemplo, Brasil ganó la Copa del Mundo en 2002 jugando con un 5-3-2. Por supuesto, tenían dos de los mejores de todos los tiempos en los carriles, como eran Cafu y Roberto Carlos. Si a esto le añades a jugadores como Ronaldo, Rivaldo y Ronaldinho, la formación era mucho más agresiva de lo que parecía en el dibujo.

La formación 5-3-2 puede ser un gran esquema para usar si tienes una gran cantidad de grandes defensores y centrocampistas centrales, y escasez de buenos extremos.

La formación también permite una gran flexibilidad, ya que puedes seleccionar dos delanteros y uno o dos centrocampistas con mentalidad de ataque. Hazlo bien y tu equipo puede controlar la posesión y lanzar ataques peligrosos, todo mientras eres difícil de vencer en la parte posterior.

Para ayudaros a aprovechar al máximo la formación 5-3-2, echemos un vistazo a sus fortalezas y debilidades antes de continuar:

REQUISITOS DE LA FORMACIÓN 5-3-2

• Centrales que se sientan cómodos jugando en zona 3 y buenos comunicándose. Cuando el equipo realiza una transición a un 3-5-2, los dos centrales de los costados deben tener el ritmo, la potencia y la anticipación necesaria para cubrir los laterales y estar cómodos con el balón.
• Carrileros o laterales enérgicos con un acondicionamiento físico. Además de defender su flanco con corazón y ser buenos en el uno contra uno, también deberían ser buenos con el balón y ser capaces de apoyar a los centrocampistas en posiciones más profundas, así como ser capaces de realizar buenos centros.
• Centrocampistas disciplinados que no solo ayudan en defensa, sino que también contribuyan en el ataque. Deben tener mucha resistencia y ser capaces de cubrir las posiciones de banda y apoyar a los carrileros. Uno o dos de ellos también deberían contribuir con goles y asistencias.
• Delanteros que trabajen bien juntos y sean incansables a la hora de correr hacia el espacio, sacar a sus rivales de posición y colocar la pelota en el fondo de la red. Si bien uno es un delantero de los de toda la vida, el otro es a menudo un mediapunta de apoyo o un jugador más creativo.

El equipo necesita comprender la alineación y las instrucciones que se les dan y saber cuándo presionar alto y cuándo esperar. Deben darse cuenta de que no marcarán muchos goles o crearán muchas oportunidades a menos que ataquen como una unidad.

Para subir y bajar el campo como equipo, todos deben tener un buen acondicionamiento físico, ya que es importante que los jugadores en los flancos y en la delantera tengan un ritmo alto.

FORTALEZAS DEL 5-3-2

Defensivamente sólido

Con cinco defensores detrás, tres mediocampistas combativos frente a ellos y dos delanteros intercambiando roles, el 5-3-2 puede ser muy difícil de derribar.

Columna central muy fuerte

Como la mayoría de los jugadores se alinean en el centro del campo, el equipo tiene una columna vertebral muy fuerte con los delanteros y los centrocampistas frente a los defensores y el portero. Como tal, es una buena formación para usar si tienes buenos centrales y centrocampistas centrales y no quieres sacrificar a un delantero.

Posibilidad de controlar la posesión

A medida que los cinco defensores se colocan profundos en el campo, crean muchos ángulos y líneas de pase junto a los tres centrocampistas. Esto significa que la formación es excelente para retener la posesión.

Se puede salir fácilmente al ataque

Cuando los dos carrileros avanzan, instantáneamente tienes una formación mucho más ofensiva. Esto permite mucha creatividad y fluidez debido al alto número de jugadores que puedes acumular arriba.

Excelente para contraatacar

Como los oponentes están casi invitados a atacar y probar a la línea defensiva de 5, dejan mucho espacio atrás para que el equipo contraataque. Lo importante es saber cuándo salir y cuándo retener la posesión.

DEBILIDADES DEL 5-3-2

Puede ser demasiado defensivo

Sin los jugadores adecuados y las instrucciones correctas, el 5-3-2 puede ser demasiado defensivo y esto significa que el equipo tendrá dificultades para avanzar y por supuesto, marcar.

Débil en las bandas

Aunque la columna vertebral del equipo es muy fuerte, la falta de mediocampistas de banda significa que los laterales pueden ser superados en número en los costados, tanto en ataque como en defensa. Esto significa que los centrocampistas centrales pueden ser sacados de su posición y tener que caer constantemente a las bandas para ayudar.

Puede ser agotador mental y físicamente

Si el equipo tiene instrucciones de defenderse durante la mayor parte del partido, entonces puede ser muy agotador perseguir a los rivales y mantenerse conectado defensivamente todo el tiempo.

El centro del campo puede congestionarse

Si los mediocampistas centrales caen demasiado en profundidad en su propio campo, tanto ellos como los centrales pueden interponerse en el camino del otro. Esto dificulta crear ángulos de pase futuros y retener la posesión, lo que invita al rival a realizar una presión tras pérdida muy sencilla.

Al contrario que en otros sistemas de juego, necesitas jugadores adecuados para aplicarlo

Si no tienes buenos jugadores de banda, o al menos, rápidos y preparados físicamente, entonces puedes tener dificultades para aprovechar al máximo el 5-3-2. Se necesitan también jugadores con una gran comprensión táctica para saber cuándo lanzar el contraataque o cuándo presionar, o cuándo presionar tras pérdida y cuándo replegarse.