Existen métodos que pueden usarse para mejorar las posibilidades de ganar de tu equipo. Tus jugadores deben estar mental y físicamente preparados antes del día del partido. Recuerda siempre a tus jugadores que tienen que trabajar más duro que el equipo contrario porque si están convencidos de que lo están, se sentirán más seguros. El acondicionamiento físico también tiene la misma importancia. Estos son los distintos métodos para conseguir llegar mentalmente preparado al partido.
- Antes del inicio: Un equipo puede ser juzgado al verlos calentar. Nunca hables de la estrategia del equipo en el túnel de vestuarios, o en el campo, ya que no sabes quién escuchará. Las tácticas se hablan en el vestuario.
- Saque inicial – Planifica y mantén la calma: Siempre debes tener un plan y mantener la calma después del saque de inicio. Haz que los jugadores implementen la estrategia del equipo como se les indicó que lo hicieran. Indica a los jugadores que no deben calentarse demasiado y que deben jugar con la mente fría. Algo que se está haciendo habitualmente es ensayar mentalmente con tus jugadores (antes del inicio del partido) e imaginar lo que va a ocurrir en el campo. Es una manera de atraer la positividad para que los jugadores salgan al campo con la cabeza centrada. Se ha demostrado científicamente que esa visualización es extremadamente útil.
- El ritmo: Mantén el juego al ritmo que tu equipo necesite. Intenta siempre establecer el ritmo de juego según tu estrategia operativa. Si las cosas van más rápido de lo que desearías, los jugadores deben ser conscientes (y sino, hazlo saber desde la banda) de que ellos mismos pueden cambiar ese ritmo. Pero también por supuesto al revés. Si el equipo contrario está manteniendo un ritmo lento, y necesitamos darle velocidad al juego, tus jugadores, en lugar de calentarse, deben utilizar otros métodos (plantar rápido el balón, dárselo al rival para que saque, etc).
- La paciencia: Los equipos pacientes son los que ganan, ya que tienen el plan de juego y tienen la confianza para ejecutarlo. Se necesitará paciencia y desgaste constante para agotar al equipo rival y fomentar que ocurra lo que queremos.
- El árbitro: Los árbitros son vitales para la forma en que se juega un partido. Siempre es bueno comprometerse y aprender la forma en la que el árbitro quiere que el juego se desarrolle.
Llegar mentalmente preparado al partido depende de varios factores. Esos factores, determinarán si tu equipo puede ganar o no.
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