El juego ha cambiado considerablemente de muchas maneras durante la última década más o menos, sobre todo en los aspectos del entrenamiento y en los conceptos tácticos. Con la mejora en las superficies de juego, en comparación con años anteriores, es decepcionante ver aspectos importantes del juego que ahora se usan raramente o incluso nunca. Estos aspectos del juego y del entrenamiento de fútbol estaban en un lugar especial en el juego en todos los niveles años atrás, pero se han ido desvaneciendo gradualmente a medida que la velocidad y la posesión de balón simplista domina el juego y las sesiones de entrenamiento en todo el mundo.
Estos son los 9 aspectos del entrenamiento que han dejado de realizarse con el paso del tiempo, pero que creemos necesarios independientemente del equipo que tengas:
- Intercambio de posición con balón: movimientos a través del campo con la pelota para unirse a un compañero que se mueve en la otra dirección para tomar posesión de él. O lo que es lo mismo, que un jugador vaya hacia el que tiene balón, arrastrando a un jugador rival, y dejando espacio para que otros (no el poseedor, como ocurre habitualmente), ataquen la espalda del defensor.
- Pases de pared: pases de este tipo, sobre todo en situaciones de banda, han dejado de darse. Estamos obsesionados con el pase hacia adelante y la verticalidad, por lo que los entrenadores de fútbol buscan únicamente la pared hacia arriba.
- Centros buscando al hombre objetivo: esto se debe a la falta de jugadores en posiciones avanzadas que sean competentes en el juego aéreo. Esta falta de “objetivos” aéreos ha aumentado los balones enviados al azar desde la banda, esperando que alguien pase por allí.
- Sacar el balón con criterio mediante un balón largo: en la evolución actual de este deporte, parece que ante presión de un rival, sea obligatorio jugar con el portero o con el jugador más cercano. Se ha dejado de entrenar el envío largo con criterio (buscando concretamente a alguien de zonas avanzadas).
- Pase de exterior: Se hace mucho hincapié en el pase con la zona interior del pie, pero se ha dejado de entrenar el pase con el exterior. Esto proporciona un efecto difícil de conseguir con cualquier otra parte del cuerpo. Es poco predecible el destino del pase, por lo que los oponentes no podrán reconocer la intención del jugador, además es más rápido de realizar que el de empeine.
- Saque de media volea con las manos por parte del portero: La “volea redondeada o completa” es ahora la norma en todo el fútbol. Este tipo de entrega tiende a ser menos precisa, pero produce más longitud. La acción de este tipo de saque tiende a ser más propensa a un mal contacto con la pelota o se quede corta. Sin embargo, la media volea tiende a ser más fácil de conectar con la pelota ya que la distancia del pie que patea la pelota es mucho más corta que el método de contacto “redondeado” de la volea completa.
- Llegar a línea de fondo: para que se produzcan huecos en la defensa de un oponente, los jugadores suelen entrar en diagonal, sobre todo con la llegada del lateral moderno. Pero ya no se entrena ni se da importancia a los extremos que intentan irse por velocidad en lugar de buscar la entrada por dentro. El desdoblamiento en el fútbol es necesario a veces, pero es importante que los jugadores también ataquen y encaren a los laterales rivales para llegar a línea de fondo e irse por velocidad.
- Un sistema de juego en forma de “diamante”: esta formación de ataque de 4 jugadores debería ser una ocurrencia regular en el juego, ¡pero no lo es! Con demasiada frecuencia los equipos que lo utilizan demuestran una falta de posicionamiento correcto, entregas pobres de la pelota y una movilidad lenta. Cuesta entrenar y encontrar información sobre este sistema, por lo que al entrenador le cuesta encontrar tareas de entrenamiento correctas para el sistema.
- La entrada defensiva: incluso con superficies de juego enormemente mejoradas, las entradas que los jugadores usaban tan a menudo en el pasado casi ha desaparecido del juego.
Estos son los 9 aspectos del entrenamiento que consideramos desaparecidos. El juego se ha vuelto demasiado controlado por las “estadísticas” y ya no proporciona variaciones tácticas, decisiones ingeniosas o el impacto del individualismo que el juego debería tener.
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