Ver el cambio evolutivo del fútbol, es una alegría para todos. La llegada del juego de posición, o los nuevos métodos de entrenamiento basados en la creatividad del jugador, como es el rondo, ha ayudado mucho al crecimiento técnico y tácticos de nuestros jugadores. El rondo es, seguramente la “forma correcta” de entrenar a adultos. Pero tenemos que discutir si esta es realmente la forma más productiva de entrenar a los jugadores más jóvenes. Como practicantes reflexivos, es esencial que nos preguntemos ¿Así debe ser el fútbol y el entrenamiento de los niños? ¿Utilizar el rondos en fútbol base es necesario?

¿POR QUÉ NO DEBEMOS ENTRENAR ÚNICAMENTE LOS RONDOS EN FÚTBOL BASE?

Muchas veces en mis entrenamientos me pregunto si esta es realmente la forma más productiva de entrenar en fútbol base. Cuando miras a los equipos de por ejemplo Pep Guardiola, ves a jugadores como Kevin De Brunye, Leroy Sane, Bernado Silva y Raheem Sterling. Todos estos jugadores tienen una excelente capacidad de jugar a un toque, pero también la capacidad de romper líneas con el balón a sus pies. Pep dijo en el pasado: “me encantan los dribladores”. Y puedes ver que esto es cierto, ya sea Messi, Alavés, o Costa y Thiago en el Bayern. También es importante reconocer que hay muchos tipos de dominación 1 contra 1 y no necesariamente significa regatear a jugadores. Si bien la mayoría del juego dentro del equipo es de 1 o 2 toques, todos los jugadores dentro del equipo necesitan la capacidad de recibir el balón y mantenerse bajo presión si es necesario, ya sea Fernandinho (pivote defensivo) o John Stones (central). Si observamos el juego al más alto nivel, los jugadores no solo necesitan dominar cuando los números son iguales en cuanto a atacantes vs defensores, sino que también es importante cuando están en superioridad o inferioridad.

Entonces, como desarrolladores de jugadores que somos, reconocemos los activos necesarios para jugar al más alto nivel. Luego debemos planificar un programa de desarrollo que aborde esto. Cuando veo gran parte de los ejercicios de entrenamiento de fútbol juvenil, a menudo se basa en el Rondo. No estoy diciendo que haya algo intrínsecamente malo con en los rondos en fútbol base, lejos de eso, soy un gran defensor de usarlo en el entrenamiento cuando sea apropiado. Mi problema surge cuando este tipo de entrenamiento se basa únicamente en el jugador más joven.

Los rondos se basan en el principio de jugar con una superioridad numérica. Ahora, como sabemos, las superioridades y la creación de las mismas son claves en el nivel competitivo más alto. Al usarlos, los jugadores siempre buscan al jugador cercano para el pase; esto es genial y puede y debe ser explotado. El problema es cuando los entrenadores están tan ansiosos por intentar que su equipo de jugadores de 9 o 10 años, jueguen como el equipo de Pep, los que confíen en este entrenamiento. El resultado es un intento “juego de fútbol bonito” con mucho juego de uno y dos toques, pero poco efectivo. Esto puede ser importante en el desarrollo del jugador, pero creo que estamos perdiendo una oportunidad.

Poder jugar rápidamente y mantener el balón es esencial para los jugadores de élite en todos los niveles, pero también lo es la capacidad de subir al balón y permanecer bajo presión. Los jugadores deben poder resolver el problema del 1×1 o 2×2 por sí mismos. Deben ser capaces de dominar un 1×1 o 1×2 o crear un 2×1 con la pelota a sus pies. Hay un dicho en la escuela del Ajax: “un 1×1 exitoso supera cualquier táctica o formación”. Cuando trabajo con jugadores puedo detectar este problema de inmediato. Necesitamos y esperamos que los jugadores puedan resolver estos problemas por sí mismos, al poder recibir la pelota y poder vencer al jugador o aferrarse a la pelota para tratar de crear espacio. Lo mejor de los ejercicios de tipo “gladiador” 1 contra 1 es que obliga a los jugadores a hacer esto.

No digo que todo el entrenamiento tenga que ser así. Puedes tener una filosofía de equipo basada en el rondo y seguir utilizando tareas como esta al menos una vez a la semana. No tiene que ser caos y regatear, regatear, regatear. Esto puede y debe encajar también en este tipo de metodología. Se trata del equilibrio y la valentía de los entrenadores. Permite que los jugadores tengan la oportunidad de subir con el balón en el entrenamiento y en los juegos. Esto puede conducir a errores, renunciar a la posesión e incluso a los goles, pero a largo plazo diría que es realmente beneficioso para nuestros jugadores.

A menudo veremos este tipo de trabajo más predominantemente en la fase de iniciación (8-11 años), pero cuando los jugadores entran en la Fase de Desarrollo (12-16) casi se ha olvidado. Hay muchas razones para esto; uno es principalmente la apertura de los tamaños de los campos y el formato del juego. Los entrenadores a menudo están bajo presión para que sus equipos se desempeñen y con desempeñarse quiero decir ganar. Aunque irónicamente, siempre aplaudimos una situación positiva de 1 contra 1, un jugador que se arriesga, que asume la responsabilidad y rompe las líneas con el balón. Desafortunadamente, todos somos demasiado rápidos para criticar a ese mismo jugador si no le sale como quería.

Estuve en una conferencia el verano pasado, y uno de los ponentes estaba hablando sobre cuándo y dónde apoyar a los jugadores. Argumentó que deberíamos decirles a los jugadores jóvenes “cuándo y dónde” usar las habilidades 1 contra 1, en las áreas correctas del campo. Esto creo que es un error dentro de la fase de iniciación, debemos alentar la valentía y la toma de riesgos. Lo más importante es la oportunidad de experimentar y cometer errores en el entrenamiento y en los partidos.

Independientemente de la edad, habilidad o nivel en el que entrenes, reflexiona sobre tu trabajo y decide si realmente estás centrado en el jugador o en el equipo. ¿Por qué te metiste en el entrenamiento de fútbol? Para desarrollar individuos o equipos. Equilibra tu enfoque y brinda a tus jugadores muchos tipos diferentes de experiencias. A largo plazo, te lo agradecerán. Los rondos en fútbol base son necesarios, pero no dejes de lado las muchas otras opciones que nos brinda este deporte.


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